6.3.11

logotipos del poder


Los logotipos del poder funcionan como símbolos, como representaciones cargadas de significado. Son un nexo para conjurar en una sola forma a las fuerzas dominantes, compartidas por el grueso de la población.

Del mismo modo que el tótem representa al animal guardián, el animal del poder que guiará al viajero durante este trance (el viaje, aquí, es entendido como viaje espiritual) los logotipos del poder rinden culto a las energías que nos impulsan literalmente: las gasolineras apostadas a los lados de un camino que parece eterno por su repetitividad y universalidad.

Tomando los logotipos de algunas de las compañías petroleras más importantes, se trata de configurar un símbolo, una iconografía de lo sacro-contemporáneo mediante el culto a los combustibles (poder, energía en estado puro) como guardianes y medio para hacer posible el viaje en nuestro tiempo.

En su forma tambien recuerdan a los mandalas budistas o hinduístas, que buscan una representación del orden natural del cosmos mediante la laboriosa forma circular, concéntrica o radial, ligado a formas de representación (figuras animales o vegetales).

Esta pieza está planeada como una caja de luz troquelada, como un letrero luminoso, para ser colgada de la pared a modo de pequeño altar, y formará parte de un conjunto mayor de objetos e imágenes que forman un espacio sacralizado, donde cada uno de los elementos estará en contínuo diálogo con los demás.