19.1.10

los espacios neutralizados




Según Marc Augé (Poitiers, 1935) los no-lugares son espacios propiamente contemporáneos de confluencia anónimos, donde personas en tránsito deben instalarse durante algún tiempo de espera, sea a la salida del avión, del tren o del metro que ha de llegar. Apenas permiten un furtivo cruce de miradas entre personas que nunca más se encontrarán. Los no lugares convierten a los ciudadanos en meros elementos de conjuntos que se forman y deshacen al azar y son simbólicos de la condición humana actual y más aún del futuro.

Del mismo modo las carreteras acentúan la impermanencia contemporánea y la falta de relación entre el sujeto y lo que le rodea, ya sea esto otra gente o el mismo medio. El sentido del viaje (y con ello en cierto modo, el de la tragedia) pierde todo su significado, tanto cualitativa como cuantitativamente.